La depresión y la ansiedad no son solo “mentales”
Cuando pensamos en salud mental, solemos imaginar solo emociones y pensamientos. Sin embargo, la ciencia y la medicina funcional nos recuerdan algo fundamental: tu mente y tu cuerpo son uno solo.
La depresión y la ansiedad no aparecen de la nada. Muchas veces están relacionadas con deficiencias nutricionales, desequilibrios intestinales e incluso acumulación de metales pesados que no se detectan en exámenes básicos.
El intestino: tu segundo cerebro
El 90% de la serotonina, neurotransmisor de la felicidad, se produce en el intestino. Por eso, cualquier alteración en la microbiota se refleja en tu estado de ánimo.
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Procesados y azúcares → inflamación intestinal → bajón anímico.
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Alcohol y estimulantes en exceso → alteran la microbiota.
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Probióticos de alta potencia (100 billones CFU) y alimentos fermentados → restauran el equilibrio.
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Fibra, vegetales y grasas saludables → medicina diaria para la mente.
Si sufres de ansiedad o depresión, cuidar tu intestino es tan importante como cuidar tu mente.
Nutrientes que marcan la diferencia
Muchas veces no es flojera ni falta de disciplina: es tu bioquímica. Deficiencias comunes asociadas a depresión y ansiedad:
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Vitamina B3 (niacina): producción de serotonina y dopamina.
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Vitamina D: bajas concentraciones = ánimo bajo.
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Omega 3: antiinflamatorio cerebral.
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Magnesio: relaja nervios, mejora sueño.
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Zinc y Selenio: esenciales para neurotransmisores y hormonas.
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Vitamina B12 y hierro: bajos niveles = fatiga, niebla mental.
Mi experiencia personal con los exámenes
En mi propio camino (Susana), descubrí que exámenes de sangre más completos pueden mostrar la raíz de lo que sientes:
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Panel de tiroides completo (TSH, T3, T4, anticuerpos): muchas veces una tiroiditis o hipotiroidismo subclínico no detectado puede “disfrazarse” de depresión.
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Vitaminas y minerales (Vitamina D, B12, hierro, zinc, selenio, magnesio): pequeños déficits influyen en ánimo, energía y enfoque.
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Perfil de homocisteína: elevado, puede indicar problemas en la metilación, relacionados con ansiedad y niebla mental.
Y algo muy revelador:
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Examen de metales pesados (plomo, mercurio, aluminio, cadmio): acumulaciones silenciosas que alteran el sistema nervioso y aumentan riesgo de depresión, ansiedad o fatiga crónica.
Lo que descubrí es que muchas de estas deficiencias y cargas tóxicas no se revisan en consultas de rutina, y por eso se cronifican síntomas que parecen “mentales” pero en realidad son bioquímicos y corregibles.
Rutinas que dañan tu salud mental (sin que lo notes)
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Dormir poco o mal → irritabilidad, ansiedad.
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Exceso de cafeína → ataques de pánico.
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Pantallas y redes sin límite → dopamina desregulada.
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Comida rápida → inflamación intestinal.
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Falta de movimiento → energía estancada.
No se trata de vivir perfecto, sino de sustituir hábitos dañinos por rituales que nutren tu mente.
Ritual AM – Energía sin ansiedad
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Evita pantallas al despertar.
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Respira profundo 3 veces.
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Prepara tu bebida con Cacao Boost 🍫 (cacao + maca + reishi + melena de león + zinc + vitamina C).
→ Energía emocional estable y antioxidante para el cerebro.
Ritual PM – Calma y descanso profundo
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Apaga pantallas 1h antes de dormir.
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Prende una vela o aceite de lavanda.
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Prepara tu bebida favorita con Dreamer Creamer (melena de león + colágeno + coco).
→ Calma el sistema nervioso y nutre tus neuronas. -
Haz journaling o agradece 3 cosas del día.
Afirmación diaria
“Me perdono, me acepto y elijo nutrir mi mente y mi cuerpo con amor.
Cada decisión que tomo hoy me acerca al equilibrio y la paz.”
💚 Recuerda
Tu salud mental no es solo lo que piensas, también es lo que comes, absorbes y hasta lo que acumulas en silencio (metales pesados, deficiencias, inflamación intestinal).
Hazte chequeos completos, escucha a tu cuerpo y acompaña todo con pequeños rituales diarios.
💚 Recuerda: tu mente se nutre con amor, presencia y coherencia.
👉 Descubre cómo ritualizar tu día con Cacao Boost y Dreamer Creamer.